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Neville se unió al Ejército de Dumbledore en «Harry Potter y la Orden del Fénix». Al igual que otros estudiantes, quería poder protegerse de Voldemort y sus Mortífagos, a pesar de que el Ministerio de Magia le aseguró que estaban bien defendidos. Su profesora de Defensa Contra las Artes Oscuras ese año, Dolores Umbridge, no estaba interesada en enseñarles hechizos reales, por lo que los estudiantes tomaron el asunto en sus propias manos.
Si bien el Ejército de Dumbledore no fue necesario durante su sexto año, ya que tenían un profesor competente, fue necesario nuevamente durante lo que habría sido el séptimo y último año del Golden Trio en Hogwarts. Sin embargo, estaban huyendo en «Harry Potter y las Reliquias de la Muerte», tratando de destruir los Horrocruxes para poder derrotar a Voldemort. Esto significaba que, aunque el grupo era más vital que nunca, no había nadie que lo dirigiera. Neville, junto con Ginny Weasley y Luna Lovegood, asumieron el papel de liderazgo, utilizando al grupo como un acto de desafío contra los Carrow, un par de Mortífagos, que fueron nombrados profesores.
A medida que los tiempos se volvían difíciles, especialmente después de que Luna fuera secuestrada y Ginny no regresara a la escuela después de Pascua, el grupo perdió fuelle. Sin embargo, Neville mantuvo vivo el espíritu, alojando a los miembros en la Sala de los Menesteres para protegerlos del castigo de los Carrow y sus seguidores mientras esperaban que llegaran Harry, Ron y Hermione.
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