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Si bien hay docenas, si no cientos, de marcianos vistos a lo largo de «Mars Attacks!», hay otra además de Martian Girl para llamar la atención: Martian Ambassador. No es solo el marciano más cruel, despiadado y vil que vemos en la película; también es el que tiene el sentido del humor más perverso, y es una de las principales razones por las que la película funciona tan bien. Lo vemos por primera vez cuando envía un comunicado a los gobiernos de la Tierra anunciando su llegada inminente, que los científicos traducen como «porque oscuro es el ante que sega la cosecha».
El embajador no solo obtiene la primera muerte de los marcianos, eliminando al general Casey, sino que también acepta la invitación del presidente Dale para regresar incluso después de que masacra al enviado militar estadounidense en el desierto. Como respuesta, hace explotar todo el Congreso. Más tarde, mientras el presidente Dale prepara un contraataque, el embajador marciano invita a los líderes mundiales a una cumbre en Francia. Mientras engaña a los diplomáticos haciéndoles creer que se puede negociar la paz, el embajador enciende otro horror sangriento en París. Aunque su mensaje de conquista fue claro, todo lo que escuchamos fue «Ack, Ack, Ack».
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