Además de actuar y modelar, Kim Basinger también tenía interés en la música, con una pasión particular por el canto. Mientras su carrera cinematográfica estaba en pleno apogeo, Basinger también intentó diversificarse con la música. Alrededor de principios de los 90, lanzó un puñado de sencillos, que en su mayoría eran versiones o colaboraciones con otros artistas más establecidos como Ozzy Osbourne y Prince, el último de los cuales estaba en una relación romántica muy publicitada.
La relación amorosa y laboral de Basinger con Prince fue la dinámica más central en el corazón de su incursión en la música. Juntos, los dos grabaron un álbum completo titulado «Hollywood Affair». El álbum fue grabado en 1989, pero nunca fue lanzado oficialmente. La relación Prince/Basinger supuestamente culminó cuando Basinger dejó Hollywood para estar con el músico en Minneapolis, solo para que su familia apareciera y separara a la fuerza a la pareja.
Aunque nunca se lanzó oficialmente, el álbum «Hollywood Affair» finalmente terminó recibiendo un lanzamiento clandestino en 1997 en Alemania, de todos los lugares. Posteriormente, el álbum llegó a Internet, donde todavía se puede encontrar hoy, pero todo esto sucedió mucho después de que Basinger dejara atrás la música. Cuando estaba motivada para intentar labrarse una carrera como cantante, no progresó mucho y dejó de perseguir activamente ese sueño con bastante rapidez.